Rendón sin dejar de darle un giro constantemente a la escultura, evidencia los momentos en que se crea la obra, la experiencia de la transformación del espacio y los materiales de trabajo. En ese sentido, su trabajo se comporta como una memoria o documento donde se registran y acumulan todos los momentos creativos y procesuales, su práctica está determinada por las condiciones sociales y físicas del espacio, sus paredes y sus propios elementos.Ricardo Rendón diseña así un sistema de investigación sobre la práctica creativa y se permite indagar en el individuo que realiza el trabajo como sujeto creador,
Como cita en su texto Paula Braga,
"En sus obras, Ricardo Rendón propone un renacimiento inverso que enfatiza el trabajo manual y expone el rostro obrero del arte conceptual, aquello que valora el proceso y la singularidad de cada gesto: Rendón demuestra la metafísica de las cosas en las cosas mismas, Está dentro de la obra, en aquello que puede ser visto y tocado, y en su proceso de creación, que el pensamiento generado por la obra permanece ", São Paulo 2013.“Donde vive la barbarie”, intervención en el espacio cultural de la manzana uno que divide el espacio en dos y deja traslucir en una, el color rojo de la otra a través de los orificios circulares, situando al espectador en una posición de contemplación frente a un espacio herido como testimonio del pasado violento del espacio de Manzana1 como lugar ocupado anteriormente por la Policía Nacional.